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ICHI THE KILLER (2001)
Esta película es una adaptación del manga de Hideo Yamamoto “Ichi the killer” dirigida por Takashi Miike. En ella se narra la historia de un clan de la mafia Yakuza que anda en busca de su jefe en desaparición. Suenan rumores de que este, ha sido asesinado por Ichi, un joven de aspecto asustadizo que puede llegar a convertirse en un despiadado asesino cando pierde el control. El clan es ahora liderado por Kakihara, un violento matón sadomasoquista que solo encuentra placer en el dolor.
El cortometraje, es realmente bizarro, con personajes que rozan la ciencia ficción, algunos de ellos caracterizados con aestilismos propios de una peli de superhéroes. Los looks que encontramos en la película, son un homenaje a la estética de mafia asiático, pero con toques muy rocambolescos.
Sin duda alguna, el personaje estrella es Kakihara y sus extravagantes looks, en los que utiliza brillos, satinados, lentejuelas, y colores muy intensons como el morado, el rojo burdeos o el rosa que hacen un contraste totalmente increíble con su pelo teñido amarillo y su violento personaje.
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BROTHER (2000)
Estamos ante otra gran película, escrita y dirigida por Takeshi Kitano. En ella se narra la historia de un capo de la mafia yakuza, que ha sido desterrado de su clan y debe huir de Tokyo si no quiere acabar muerto. Su destino, Los Ángeles, donde reside un hermano pequeño con el que forjará un nuevo camino criminal.
Lo más interesante de este cortometraje es la mezcla de distintas culturas y estéticas, y que el encargado de vestir a los personajes, es el diseñador Yohji Yamamoto. Por un lado, tenemos la estética de la mafia yakuza japonesa, y por otro la estética gangster de Los Ángeles, y de la mafia italiana a la que se enfrentan en el film. Es increíble ver como los personajes maman de unas influencias y de otras para construir sus propias personalidades y códigos a la hora de vestirse.
Fuera de los estilismos, la película es una pasada, con buenas dosis de acción y fotografía que te dejarán embobado hasta el final.
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GONIN (1995)
Escrita y dirigida por Takashi Ishii, cuenta la historia de cinco hombres que se ven invloucrados en el robo de un buen pellizco de dinero a la yakuza japonesa. Tras el robo, un implacable asesino les dará caza hasta encontrar al último de ellos.
En esta película nos encontramos con un guión algo diferente, donde se juega con la sexualidad de alguno de los personajes, y si les tilda con personalidades bastante marcadas. Los estilismos cubren un elenco de todos los esteriotipos que podemos encontrar en este tipo de películas; Desde el glam de noche y brillos, hasta la pura elegancia de traje y corbata con cortes anchos y olgados.
En este cortometraje, también aparece Takeshi Kitano, pero esta vez como actor, y como no, haciendo el papel de un tío duro sin escrúpulos, al que matar no le hace ni pestañear.
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Escrito por Adrián Lorca
